Cuando elegimos un dispositivo de medición, nos guiamos principalmente por sus parámetros, porque suponemos que nos proporcionarán la mayor precisión y la mejor repetibilidad de las indicaciones. ¿Es correcto?

Es cierto que los parámetros de la balanza tienen una gran influencia en el resultado de la medición, pero no solo ellos. Las condiciones en las que funciona el dispositivo también juegan un papel importante, a saber, el lugar donde se coloca la balanza, el volumen de la sala de pesaje, la temperatura, la humedad, las ráfagas de aire y la iluminación en la sala de pesaje, así como la compatibilidad electromagnética.

Condiciones incorrectas en la sala de pesaje

1. Ubicación incorrecta de la balanza

Si se producen vibraciones o golpes en la sala de pesaje, elimínelos colocando la balanza sobre una superficie adecuada, por ejemplo, una mesa antivibrátil. Además, debe deshacerse de los elementos magnéticos, ya que pueden interferir con el proceso de pesaje, y la electricidad estática, ya que tiene una influencia significativa en la medición precisa de la masa. Además, el puesto de pesaje no debe estar expuesta a ráfagas y la red de alimentación no debe ser inestable ni estar expuesta a perturbaciones.

2. Capacidad inadecuada de la sala de pesaje

Factores como el volumen de la sala de pesaje y el número de personas que permanecen en ella al mismo tiempo influyen en la estabilización térmica de la sala.

La sala de pesaje no debe ser demasiado pequeña, ya que las personas que se alojen en ella la calentarán rápidamente y, por lo tanto, provocarán un error de temperatura dinámico. Además, mantener una temperatura estable en dicha habitación requiere un funcionamiento constante del aire acondicionado, que, en primer lugar, genera ráfagas y, en segundo lugar, es caro.

3. Temperatura incorrecta en la sala de pesaje

La temperatura en la sala de pesaje debe ser constante dentro del rango especificado en el manual. Se considera que la temperatura es estable cuando sus fluctuaciones no superan los 0,5 ° C / hora.

Hay las balanzas con calibración externa e interna. En el caso del primero, la precisión debe establecerse siempre que cambien las condiciones ambientales. Por otro lado, en las balanzas con calibración interna, el proceso de renovación de la precisión es automático, como consecuencia de los cambios de temperatura y el paso del tiempo.

4. Humedad inadecuada en la sala de pesaje

La humedad óptima en la sala de pesaje está entre el 40 y el 60%. Valores demasiado altos de humedad afectan negativamente la comodidad del trabajo y pueden resultar en la absorción de humedad por las muestras analizadas. Por otro lado, valores demasiado bajos crean un riesgo de cargas electrostáticas, que pueden perturbar la precisión de la medición y la estabilidad de la balanza.

5. Ráfagas de aire en la sala de pesaje

Las ráfagas de aire provocan lecturas inestables y un tiempo de pesaje prolongado. Por este motivo, las balanzas no deben ubicarse cerca de puertas, ventanas, aire acondicionado, ventiladores, pasillos u otros lugares y dispositivos que generen ráfagas.

6. Iluminación inadecuada en la sala de pesaje.

Las balanzas no deben colocarse cerca de ventanas u otras fuentes de luz, ya que la temperatura puede interferir con la medición.

7. Falta de compatibilidad electromagnética

La falta de compatibilidad electromagnética conduce a interrupciones en el funcionamiento de los dispositivos ubicados en la misma habitación.

Dispositivo compatible electromagnéticamente:

• emite perturbaciones electromagnéticas en un grado que no interfiere con el funcionamiento de otros dispositivos,

• no se ve afectado por las perturbaciones emitidas por otros dispositivos.

El usuario no tiene ninguna influencia sobre la compatibilidad de los dispositivos utilizados, ya que a este respecto se basa en las declaraciones del fabricante.

En el caso de balanzas verificadas, declarar la conformidad EMC solo con la norma PN-EN 45501 no es suficiente, ya que incluye la prueba de resistencia de pesaje y no incluye la prueba de emisiones. Por esta razón, deben realizarse pruebas adicionales que confirmen completamente la compatibilidad de la balanza, por ejemplo, con la norma PN-EN 61326-1.

Temperatura incorrecta en la sala de pesaje, selección incorrecta de la ubicación de instalación de la balanza, o tal vez vibraciones y explosiones ... ¿También comete usted estos errores? Si no sabe cómo solucionarlos, póngase en contacto con nuestro experto que estará encantado de responder todas sus preguntas.